La ciencia del olor

Convertirse en una empresa de fragancias requiere una amplia formación, ya que nuestro sentido del olfato es más sensible que cualquier otro en neurociencia. El olfato tiene la notable capacidad de conectarnos con un lugar o momento específico, e incluso desencadenar recuerdos de seres queridos. Es intrigante saber que nuestro sentido del olfato, al ser 10.000 veces más fuerte que cualquier otro, forma poderosas asociaciones en el cerebro, lo que nos permite recordar vívidamente experiencias pasadas y presentes. 

La investigación científica ha revelado cómo los olores pueden acceder a partes profundas de nuestra mente. Las fragancias poseen la increíble capacidad de transportarnos a diferentes lugares de nuestra mente. Nuestros cerebros almacenan recuerdos y un solo aroma puede desbloquear una avalancha de emociones y experiencias asociadas, ofreciéndonos una sensación de hogar y pertenencia.

Incluso cuando nuestros cerebros cambian con el tiempo, los recuerdos de los olores permanecen profundamente arraigados en nuestras experiencias generales. Es a la vez cautivador y crucial reconocer que la fragancia es el sentido principal que utilizamos para navegar por el mundo que nos rodea, y sirve como una herramienta maravillosa para evocar recuerdos y emociones.